Observar hoy la curva de demanda de energía del país nos trae una excelente noticia, siendo la mayor parte de la energía que hemos consumido de fuentes independientes de los combustibles fósiles. En concreto, la producción de la energía de origen eólico ha alcanzado el 40-45% de la demanda, un 30% de centrales nucleares, y un 20% de otras fuentes de energía en régimen especial. Solo un 10% de la energía ha provenido de combustibles fósiles, 5% de carbón y 5% de centrales de gas (ciclo combinado). Como resultado, las emisiones de CO2 ha sido de 3000-4000 ton/h, la tercera parte de un domingo “normal”. Las fuentes de energía han generado incluso excedentes para la exportación de energía, y para la acumulación de agua en centrales hidráulicas.
Estos resultados se deben al esfuerzo invertido en los últimos años por conseguir fuentes de energía limpias, baratas, y respetuosas con el medio ambiente. Combinadas con políticas de reducción de energía y una conciencia de cuidado por el medio ambiente, es posible el abastecimiento eléctrico de la sociedad con contaminación cero.