Continuamos con las entradas para renovar y alargar la vida de nuestros Galaxy S2, un dispositivo que pesa a los años sigue siendo un gran móvil, capaz de rivalizar con muchos móviles actuales. En esta entrada anterior vimos como sustituir la placa que controla la carga y arreglar los problemas de batería. En esta vamos a ver como reemplazar la lente de la cámara de fotos.
Con el tiempo y el uso es muy probable que la lente de la cámara trasera de vuestro móvil se haya ido rayando progresivamente rayado. Si la observáis con detenimiento observaréis desgaste originado por el roce al dejar el móvil, lo que provoca que la lente haya perdido transparencia. Si este es vuestro caso habréis notado una pérdida importante de calidad en vuestras imágenes, que aparecerán borrosas, menos definidas, y con colores menos vivos.
Afortunadamente esta reparación es rápida, bastante sencilla, y muy barata. Podéis encontrar el recambio necesario por aproximadamente 1 a 1,5€, gastos de envío incluidos. Simplemente tenéis que buscar en Ebay “Lens camera i9100”, asegurándonos de tener como opción buscar en vendedores internacionales. La pieza se encuentra disponible en dos colores (negro y plateado), a gusto del usuario.
La pieza que recibiréis es similar a la siguiente. Para sustituir la lente de la cámara debemos abrir nuestro móvil. Para ello retiramos la tapa trasera, la batería y la tarjeta SIM. A continuación, desatornillamos los tornillos indicados en la figura. Abrimos el móvil, con mucho cuidado de no dañar ningún componente. Prestamos especial atención a los botones de los laterales de los móviles, cables, y a las piezas de plástico de la carcasa, pues son muy delicados. Ahora debemos soltar las tres patillas metálicas que sujetan la lente. Con cuidado, empleamos un destornillador para levantar las patillas, tal y como indica la siguiente figura. Retiramos el protector metálico de la lente, dejando al descubierto la lente que protege la cámara y la lente del flash. Estos componentes están adheridos pos una almohadilla de gel adhesivo. Retiramos ambas piezas, aplicando presión suavemente, intentando conservar el gel adhesivo para emplearlo en la sujeción de las piezas de repuesto. Realizamos el montaje de las nuevas lentes. Somos especialmente cuidadosos en no tocar las partes transparentes de las nuevas lente con los dedos, para evitar dejar marcas de grasa. A continuación colocamos la pieza metálica del recambio. Finalmente apretamos las patillas del nuevo protector metálico, intentando que quede apretado pero sin dañar las patillas. Las patillas son delgadas, y no resulta conveniente tener que desdoblarlas para realizar correcciones. Es importante que pongáis cuidado y consigáis fijarlo bien a la primera. Antes de cerrar nos aseguramos de que todo está perfectamente limpio, sin huellas de dedos, ni motas de polvo. En caso de que fuera necesario, limpiaríamos las superficies con ayuda de un bastoncillo de oídos humedecido con una gota de alcohol. En ningún caso intentaremos limpiar la cámara (ubicada en la otra mitad del móvil) o podemos causar graves daños.
Cerramos el móvil, con cuidado de colocar correctamente todos los componentes y ¡Listo! Ya podemos encender nuestro móvil y comprobar la mejoría en la calidad de imágenes tras ponerle “gafas” nuevas.
La reparación de un móvil es una operación delicada que requiere de cierta experiencia y habilidad. No nos hacemos responsables de ningún daño que podáis causar a vuestro dispositivo durante el proceso de reparación.