En mi primer post hablaba de la transición a la web 2.0. ¿Pero, en qué consiste realmente?
El término Web 2.0 es una forma de designar a un cambio en la red originado por nuevas herramientas como los blogs, las redes sociales (facebook, twitter), los RSS, entre otros. El término fue empleado por Tim O’Reilly, en una conferencia en 2004. No obstante, el concepto no se refiere a un cambio técnico, si no a una forma de uso. De hecho, el creador del World Wide Web Tim Berners-Lee, calificó al término como “tan sólo una jerga”, dado que tenía pensado desde el principio que la Web incorporase estos valores.
El problema con las páginas html, las “de toda la vida” es que añadir un nuevo contenido exige bastante trabajo y, finalmente, terminan por quedar desactualizadas. Las herramientas de la Web 2.0 permiten eliminar este carácter estático que de forma inevitable aparecia en casi todas las páginas web. Además hace que sea sencillo compartir contenidos, y de esta forma aparecen blogs de recetas de cocina, de cursos de ganchillo, o de aficionados al patinaje, realizadas por usuarios que, de no disponer de estas herramientas, seguramente no podrían generar una página html convencional. Finalmente, te permiten añadir los botones “+1” de google, “me gusta” de facebook, y alimentadores RSS, que permiten compartir en redes sociales las novedades de tu página. De esta forma tus conocidos pueden visitar tu página y te hace más sencillo compartir tu publicaciones.
Pero la cosa va mucho más allá, dado que un buen número de empresas se están viendo “obligadas” a realizar el cambio a Web 2.0. Pero ¿por qué una empresa desea hacerse una página en Facebook? ¿Qué sentido tiene? Pues principalmente porque Google valora de forma muy positiva los elementos de la web 2.0 en el posicionamiento en sus búsquedas (por experiencia propia puedo decir que en muchas empresas aparece antes el blog que su propia página web). De esta forma Google intenta evitar las tendencias de los últimos años, donde al buscar una página podría aparecerte una página web 1999, totalmente desactualizada. Además las empresas ven en la forma de compartir y seguir de las redes sociales, una forma de publicitarse (algo que aún esta por ver hasta que punto es cierto). De esta forma la página web pasa a ser un elemento estático, un cartel publicitario colocado en internet, mientras que el peso de las noticias, actualidad, etc, pasa a ser sostenido por las redes sociales, los blogs, y los rss.
Por tanto, el cambio de uso está claro. Frente al concepto de Web 1.0, donde el usuario abría el explorador y tenía como página de inicio su buscador, y de ahí pasaba a consultar páginas, en la Web 2.0 el uso del buscador pasa a un segundo plano, siendo los propios usuarios los que comparten las noticias y enlaces de interés entre ellos, y los propios usuarios valoran el contenido de una noticia a través de los botones “+1” y “me gusta”. Como muestra de este cambio esta los cambios de política de Google en cuanto a la valoración de las páginas web, o el hecho de haber hecho su propia red social, Google+, para evitar perder cuota de mercado frente a Facebook.